Conocer, conocer para querer, querer para amar, amar para vivir. El te quiere, tu le quieres, todo es muy bonito, hasta que un día, sin ton ni son empiezan las dudas y tu sin saber porque empiezas a no estar augusto a su lado. Decides hablar. Claramente tu savias lo que haba a pasar, ya no estáis juntos. Pero tu vida sigue, te hundes un par de días, pero pasa el tiempo y aunque tu hayas amado a esa persona el dolor es cada vez menor. No has sabido de su existencia desde hace meses, pero decides llamarle, comunica, no importa mas tarde lo llamo, pero tal vez sea demasiado tarde porque, en esos cinco minutos de espera tu ya te has asomado por la ventana y lo has visto pasar agarrado de una chica. ¿Si? Pues muy bien, voy a salir Te vistes y te calzas, coges las llaves y sales a la calle, llamas a unas amigas y te vas ¿Dónde? A disfrutar.
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